Un colesteatoma es un quiste que se crea en la parte interior del oído, justo detrás del tímpano, y que a menudo suele confundirse con un tumor cancerígeno, sin embargo, este no suele ser maligno a menos que surja una complicación. Sin embargo, lo ideal es conocer al colesteatoma y su tratamiento.
¿Cuál es la definición de Colesteatoma?
El colesteatoma es una inflamación purulenta crónica del oído medio causada por la extensión del epitelio escamoso del conducto auditivo externo hacia el oído medio manifestándose en una acumulación de tejido o un quiste en la piel.
Como regla general, el tímpano separa el oído medio y el conducto auditivo externo. En personas sanas, el oído medio está revestido con epitelio de mucosa y el conducto auditivo externo con el epitelio escamoso.
Si este epitelio escamoso ingresa al oído medio por una variedad de razones (como un orificio o una rotura en el tímpano), esto puede conducir a un estímulo inflamatorio constante.
Síntomas del quiste
Normalmente, el colesteatoma inicialmente se presenta como una enfermedad crónica como la otitis, además de presentar un olor fétido (otorrea fétida) y un aumento de la sordera completa o sordera en un oído.
Debido a la mala ventilación del oído medio, puede venir además de una presión en el oído. En etapas más avanzadas también hay síntomas más graves, como Trastornos del equilibrio en caso de ataque del colesteatoma en el oído interno o el órgano de equilibrio.
Otro síntoma de colesteatoma es la parálisis facial del nervio facial, debido a su proximidad cercana al oído medio lo que ocasiona un entumecimiento en uno de los lados de la cara.
Causas de un colesteatoma
Hay tres causas conocidas del colesteatoma, el congénito, el primariamente adquirido y por último el adquirido secundariamente.
El primero de ellos, el colesteatoma congénito es sumamente poco común, y es formado porque el epitelio escamoso permaneció en el oído medio al momento de la formación del embrión, pero el tímpano está intacto.
El segundo, el primariamente adquirido o por retracción es causado por un trastorno de ventilación en el oído medio. Esto generalmente ocurre en el área de la pars flaccida del tímpano o también llamada membrana de metralla. La razón de esto es que la Pars flaccida, a diferencia de otras áreas del tímpano, es muy flácida. El epitelio escamoso se acumula en este bolsillo de retracción, y después de unos años, esto finalmente resulta en un colesteatoma.
El último de los tipos de colesteatoma es el secundario o temporalmente adquirido y la razón de este tipo de colesteatoma es un defecto marginal del tímpano ya existente, sobre el cual el epitelio avanza hacia el oído medio.
Diagnóstico del mismo
El diagnóstico de esta enfermedad surge a partir de un imprevisto, es decir, por casualidad, por medio de un examen de Tomografía computarizada o una resonancia magnética, donde se puede observar con claridad la acumulación de tejido. Luego de esto se realiza una otomicroscopia para verificar que el hallazgo se trata de un colesteatoma realizando un estudio de la membrana timpánica.
Además se puede realizar un audiograma ya que normalmente, en los pacientes con colesteatoma se encuentra una pérdida auditiva conductiva, es decir, un trastorno auditivo que afecta solo al oído externo. Sin embargo, si el colesteatoma ya está tan avanzado que el oído interno ya está afectado, existe un llamado trastorno sensorial del sonido. El diagnóstico es necesario para pasar al colesteatoma y su tratamiento, el cual es inevitable.
Colesteatoma y su tratamiento ¿qué métodos se usan?
Si se desea lograr la curación completa del colesteatoma, la única opción y método utilizado es la cirugía. Aquí todos los focos inflamatorios destructivos en la cavidad mastoidea y timpánica deben ser radicalmente eliminados.
Solo en el segundo paso del colesteatoma y su tratamiento, generalmente con una segunda operación, se busca una mejora de la audición. Como regla general, esto se logra mediante una llamada timpanoplastia. Se restaura el tímpano y, si es necesario, la cadena osicular.
La aparición repentina de parálisis facial o nistagmo, la cirugía es inevitable por lo que debe hacerse de manera inmediata.
Una terapia conservadora, es decir, un tratamiento no quirúrgico, solo puede usarse como preparación para una operación absolutamente necesaria. De forma similar a una otitis media crónica simple, se usan medidas locales (gotas para los oídos antibióticos) o terapia con antibióticos sistémicos. Esto solo ocurre para reducir la inflamación y la infección que pudo haber surgido.
De una u otra manera, una intervención quirúrgica es completamente necesaria para deshacerse de un colesteatoma, además que si este no es removido lo más pronto posible, pues el colesteatoma y sus complicaciones son bastante agresivas, atacando el cerebro y el sistema nervioso central.